El diputado por Paysandú del Partido Colorado, Walter Verri, expresó su preocupación tras la comparecencia de la ministra de Industria, Fernanda Cardona, y de autoridades de ANCAP en la Comisión de Industria de la Cámara de Diputados, donde se presentó el nuevo plan estratégico para la producción de cemento portland.
Según explicó Verri, la decisión del gobierno es mantener un solo horno productivo de cemento en Minas, mientras que la planta de Paysandú dejará de fabricar clinker y pasará a cumplir funciones de molienda, envasado y distribución, abasteciendo principalmente al norte del país.
“La planta no se cierra, pero deja de ser una fábrica. Ya no va a producir clinker, eso implica un golpe fuerte para Paysandú”, señaló el legislador.
Verri afirmó que el diagnóstico presentado por el Ejecutivo no lo sorprendió, aunque sí le dejó “un sabor amargo” como representante del departamento. Detalló que ANCAP perdió 24,5 millones de dólares en 2024 en su división cementera y acumula déficits por unos 800 millones de dólares en las últimas décadas.
“El costo de producir una tonelada de cemento en Paysandú es más del doble de su precio de venta. En Minas es apenas menor, pero sigue siendo muy alto”, explicó.
El diputado atribuyó la crisis a años de falta de inversiones, decisiones estratégicas equivocadas y pérdida de mercado frente a competidores privados más eficientes y automatizados. Recordó, además, inversiones fallidas como la del horno semi-seco en Paysandú, que implicó un gasto cercano a los 50 millones de dólares sin llegar a funcionar plenamente.
La ministra Cardona anunció inversiones por unos 5 millones de dólares en 2026 y 26 millones durante el resto del período, concentradas mayoritariamente en la planta de Minas para sostener la producción con un solo horno.
Verri subrayó que, según lo informado por el gobierno, no habrá pérdida de puestos de trabajo, lo que lleva tranquilidad a más de 400 familias vinculadas a las tres unidades de ANCAP (Paysandú, Minas y Manga). No obstante, advirtió que el proceso para frenar las pérdidas será lento y que la situación es crítica: “El año pasado, cerca del 15% del cemento que vendió ANCAP fue comprado a la competencia y envasado como propio. Eso muestra la dimensión del problema”.
En contraste, Verri destacó avances en el proyecto de HIF Global en Paysandú. Confirmó que se aprobaron la localización ambiental, el proyecto en la COMAP y que existe un preacuerdo con UTE para el suministro e intercambio de energía eléctrica.
Además, adelantó que el gobierno firmará próximamente un nuevo memorándum de entendimiento con la empresa, con un cronograma de obras definido. “Son buenas noticias. El proyecto sigue en Paysandú, en el mismo lugar, y esperamos que los temas con Argentina se resuelvan de la mejor manera”, afirmó.
Consultado sobre una eventual participación de ANCAP como socio en HIF, Verri fue categórico, aseguró que ese tema no está sobre la mesa y reiteró su postura contraria a que la empresa estatal asuma riesgos financieros en el proyecto.
“No creo que ANCAP deba invertir 2.000 millones de dólares para ser socia. Uruguay tiene otras prioridades y ya hubo malas experiencias cuando ANCAP se involucró en negocios ajenos a su función principal”, enfatizó.
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