Bolivia enfrente hace doce días un bloqueo de carreteras por parte de partidarios del ex presidente Evo Morales que enfrenta una acusación por un caso de abuso y trata de menores.
Este bloqueo ha provocado una pérdida económica muy grande y la escasez de alimentos y asistencia a varios hospitales, viviendas y albergues.
A la situación económica, se suma la falta de dólares en el país, lo que provocó que los bancos pusieron límites para las operaciones en esa moneda. Esta situación generó que se generara un mercado paralelo y la imposibilidad de hacer transacciones con el tipo de cambio oficial.
Bolivia también sufre un desabastecimiento de combustibles, debido a las crecientes dificultades de importación y la baja producción local, lo que repercute, directamente en el sector productivo y la seguridad alimentaria del país.
Los conflictos tienen como epicentro la ciudad de Cochabamba, zona cocalera y el bastión político y organizativo de Morales. Allí es donde el expresidente se ha refugiado para evitar ser arrestado y en ella se han montado los cortes de ruta más fuertes.
La periodista boliviana Fabiola Chambi destacó en Informativo Carve del Mediodía cómo es la situación actualmente en este país y cómo se viven las protestas.
La policía intervendrá en las próximas horas las protestas, que están llevadas adelante por grupos armados, que, según las autoridades, están poniendo en riesgo a la población y la estabilidad del Estado.
También resaltó que detrás de esta situación hay una “lucha por el poder” entre Morales y el actual presidente Luis Arce. Esto está perjudicando a la gobernabilidad del país.
La situación es muy compleja y afecta principalmente a los trabajadores informales, que representan un 80% de la economía del país.
El comercio de la mitad del país está bloqueado y los productores de alimentos ven cómo su producción se pudre sobre los caminos y ensayan protestas inusuales para exigir que los bloqueos cesen.
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