Al menos once personas murieron este martes y más de 4.000 resultaron heridas, por la explosión de localizadores de mensajería que estaban en manos de miembros de Hezbolá en varios puntos del Líbano.
El grupo armado anunció que entre los fallecidos hay una menor de 10 años y el hijo de un diputado. En tanto, uno de los heridos es el embajador de Irán en Beirut, Mojtaba Amani. El movimiento atribuyó las explosiones a una “operación israelí”.
Las explosiones se produjeron a pocas horas de que Israel anunciara que extiende a su frontera con Líbano los objetivos de la guerra, hasta ahora centrada en la lucha contra el movimiento islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza.
El periodista Tomás Friedmann, especializado en temas internacionales, destacó en Informativo Carve de Cierre que existía una confusión absoluta en la población, debido a que no comprendían porque estallaban estos aparatos.
Los bíperes o buscapersonas son utilizados por los miembros de este grupo debido a que Israel destruyó hace varios años el sistema de telefonía móvil y fija. Sin embargo, las explosiones no se restringieron únicamente a integrantes de Hezbolá.
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