En entrevista con Valor Agregado, el Dr. Héctor Ferreira, socio del Estudio Hughes & Hughes, analizó la resolución de la Comisión de Promoción y Defensa de la Competencia, que abrió una segunda fase para evaluar el nuevo planteo de Minerva: quedarse con una sola planta en Uruguay (La Caballada), vender Colonia de forma inmediata al grupo indio Allana y comprometerse a vender San José en un plazo máximo de 24 meses. Ferreira explicó que este nuevo escenario implica, en términos formales, “arrancar de cero”, aunque se podrán utilizar antecedentes del análisis anterior. La Comisión recibirá aportes de terceros y luego tendrá 60 días —prorrogables— para emitir resolución.
El presidente de la Asociación Rural del Uruguay, Rafael Ferber, cuestionó duramente la propuesta de Minerva. En entrevista con Valor Agregado, calificó de «raro» que la empresa compre plantas para luego comprometerse a venderlas, y recordó antecedentes en Brasil donde esos compromisos no se cumplieron. Ferber afirmó que esta reformulación no cambia la lógica del negocio, que sigue siendo “sacar competencia del medio” y controlar el precio del ganado. Además, mostró dudas sobre la seriedad del grupo Allana, que según indicó, compraría el Frigorífico Colonia a un precio elevado sin haberlo siquiera visitado.
Desde la Federación Rural, el Ing. Agr. Rafael Normey también rechazó el nuevo planteo y dijo que se trata de una “propuesta mamarrachesca”. Sostuvo que el fondo del negocio es controlar la faena para bajar el precio del ganado y aumentar los márgenes de las empresas. Alertó que ofrecer 24 meses para vender una planta “sin decir a quién ni cómo ni cuándo” es una tomadura de pelo y reclamó que se respete el análisis técnico de la Comisión.
El analista de mercados Lic. Andrés Oyhenard, de Tardáguila Agromercados, explicó que si se aprueba el negocio en los términos actuales, Minerva pasaría a controlar alrededor del 33% de la faena, convirtiéndose en el principal grupo del sector en Uruguay, por encima de Marfrig. Sin embargo, señaló que ese nivel no representa un cambio tan drástico como en la propuesta original, que implicaba un 45% de participación. Oyhenard también destacó que el compromiso de vender San José en 24 meses genera incertidumbre, y recordó que Minerva ya tiene plantas con capacidad ociosa, como Carrasco, lo que refuerza los cuestionamientos de las gremiales. Advirtió, además, que los plazos del acuerdo entre las empresas vencen en agosto, lo que podría presionar la decisión del Poder Ejecutivo.
