El próximo 21 de noviembre la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE) va a realizar una recorrida por la unidad 4 del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) junto con autoridades de los ministros del Interior, Desarrollo Social e Industria, además de empresarios y representantes de las cámaras empresariales con el objetivo de entablar un vínculo con privados de libertad y generar alianzas para incentivar el empleo para presos.
Esta recorrida se enmarca en el programa “Liberados” que lleva adelante ACDE, que apunta a buscar segunda oportunidades para quienes recuperan la libertad.
La socia de ACDE y referente del proyecto, Teresa Cometto, y el gerente de Recursos Humanos de Ingener, Fernando Posada, hablaron en Informativo Carve del Mediodía sobre el programa, cómo se viene ejecutando, cómo es el relacionamiento con las empresas y los beneficios que tiene para las mismas, entre otras cuestiones.
Uruguay se encuentra entre los ocho países del mundo con mayor cantidad de privados de libertad per cápita. Actualmente hay más de 16.000 presos, 70% de los cuales son reincidentes. De este total, entre 29 y 30 personas salen de las cárceles por día, sin muchas posibilidades para reinsertarse en la sociedad.
Con este escenario de contexto, y con el objetivo de sensibilizar a toda la población, en una problemática que para Cometto todos tenemos responsabilidades, es que ACDE comenzó a trabajar en este proyecto.
Además, también se busca que haya un trabajo articulado entre el gobierno, la sociedad civil y los privados en buscar alternativas con el objetivo de incrementar la reinserción laboral de personas liberadas.
El proyecto cuenta con el apoyo de Manpower que trabaja en la preparación para su salida, ya sea para tener entrevistas laborales, para para mejorar su lenguaje, para hacer su currículum, para manejar las frustraciones y sus emociones.
El objetivo de estas recorridas es generar conciencia en las empresas, para que más se suman a este, dejando de lado sus prejuicios.
Cometto destacó que en las empresas públicas lo que se está haciendo es establecer un puntaje en funcionó de las contrataciones a personas liberadas, que pesará en las licitaciones por llamados.
En tanto, en las empresas privadas se trabajar con el área de gerencia general o de recursos humanos en programa de voluntariado o con colaboración económica.
“Esa posibilidad de levantarse es muy difícil para personas que son liberadas, que tienen un estigma y que tuvieron una connotación, un contexto de vida complejo, y no estoy justificando. No podemos juzgar, podemos tratar de entender lo que las personas pasaron, son parte de nuestra sociedad y si tenemos uno de los números per cápita más altos, alguna cosa deberíamos tratar de hacer para revertir esa situación”, señaló Cometto.
Actualmente hay unas 90 personas liberadas trabajo en empresas que se han sumado a esta iniciativa.
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