Ni la Fiscalía de Delitos de Lesa Humanidad ni la Institución Nacional de Derechos Humanos llevarán a cabo acciones a raíz de las declaraciones de Lucía Topolansky en el libro “Los indomables”.
En este texto Topolansky afirmó que hubo testigos que “mintieron” en los juzgados para que se castigara a militares acusados de crímenes cometidos en la dictadura.
El fiscal Ricardo Perciballe dejó en claro esta semana que no actuará de oficio. Tampoco tiene previsto dar ninguna indicación en ese sentido la fiscal general Mónica Ferrero.
Los abogados del Centro Militar, que defienden a condenados por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura, pedirán a la Suprema Corte de Justicia la revisión de algunas causas.
Emilio Mikolic, uno de los abogados del Centro Militar, dijo que las declaraciones de Topolansky constituyen un “hecho nuevo” y que “casi todos los procesamientos y condenas fueron realizados sobre la base de declaraciones de testigos”.
Un grupo de expresos políticos de distintas organizaciones que fueron víctimas del terrorismo de Estado expresaron que a veces uno debería ser capaz de retirarse en silencio y con más dignidad.
En un comunicado se preguntaron cuál es el motivo o el pacto con los represores que la llevan a injuriar, a poner en tela de juicio, a desacreditar a personas que fueron presas y torturadas.
En diálogo con Informativo Carve del Mediodía Mikolic señaló que sin dudas “hay gente que mintió” para que varios militares sean condenados.
También cuestionó los procesamientos de la Justicia en casos de Derechos Humanos, y resaltó que “son casos que se juzgan con otra vara”. “La gente sabe que una cosa es un juicio y otra cosa es un juicio militar. Los juicios militares parece que están exentos de las garantías mínimas que tenemos los otros ciudadanos en condiciones absolutamente normales”, agregó.
“La situación es compleja porque son hechos que ocurrieron hace 40 o 50 años. En definitiva todo queda en función de la versión y el relato de personas que dicen haber estado o que estuvieron en el lugar, y dicen recordar e identificar a determinadas personas. Muchos de los reconocimientos incluso no son ni siquiera con una constatación visual. Existe una gran cantidad de casos donde una víctima o un testigo dice ‘yo reconozco a Fulano por la voz, nunca le vi la cara pero esa voz la reconozco’, y pasaron 30, 40 o 50 años. Eso es más que suficiente para que en Uruguay privemos de libertad a una persona sin ningún tipo de garantías”, cuestionó.
Por otra parte, el abogado resaltó que se va a pedir una revalorización de los testimonios y nuevas declaraciones en los juicios que están en trámite, así como también se presentarán recursos extraordinarios de revisión ante la Suprema Corte de Justicia para aquellos casos que tienen sentencias firmes.
Escuchá la entrevista completa:
En Soundcloud:
